martes, 13 de abril de 2010

Vampiros en la literatura

El siguiente turno es tomada por Sheridan Le Fanu, con Carmilla en 1872. Se presenta al vampiro como una víctima de su propio Estado y se opone al mismo tiempo, bien pensado de Gran Bretaña abordar el lesbianismo del personaje, sabiendo que la homosexualidad fue condenado enérgicamente. En 1897, Bram Stoker creó Drácula el vampiro que el carácter ficticio de la coronación en sí mismo.